Albert Rivera desnuda las intenciones de su partido y muestra su apoyo incondicional a la candidatura de Juan Marín a la presidencia de la Junta de Andalucía, en un acto celebrado en el Hotel Parador Atlántico de la ciudad de Cádiz ante más de 600 personas. Flanqueado por el propio Juan Marín, cabeza de lista de Ciudadanos en las comicios autonómicos, y por Sergio Romero, número uno de la Candidatura del partido ‘naranja’ por Cádiz.

Unos 15 minutos más tarde de lo previsto, hicieron acto de presencia en la sala de convenciones del Hotel Parador Atlántico, abarrotada, los tres políticos; Albert Rivera y sus ‘teloneros’ de lujo en el día de hoy, Juan Marín y Sergio Romero. Un pasillo humano de unas 650 personas llegadas de todos los puntos de la provincia, aplaudían  puestos en pie a los líderes partidarios, que atravesaban dicha marea humana devolviendo gestos de cariño a los allí presentes. Todo estaba listo para que arrancase la gran cita de los ciudadanos gaditanos.

 

Sergio Romero

El número uno por Cádiz en las Andaluzas, Sergio Romero, sanluqueño diplomado en Turismo y técnico superior en Márketing, dió el pistoletazo de salida a las intervenciones, con un alegato lleno de  intenciones reales y dejando claro en todo momento la razón por la que estaban él y todos los presentes allí, “robando el tiempo a nuestro presente para dárselo a nuestro futuro”.

Como era lógico, sus palabras fueron dirigidas principalmente para la provincia de Cádiz, de la cual afirmaba que “no va a venir nadie a salvarnos, tenemos que ser nosotros los que luchemos por salir a flote”, y de la que abogaba por “aprovechar sus riquezas naturales para lograr que donde vivimos sea un lugar próspero y feliz”. Con rotundidad habló de que “ha llegado la hora de la política del siglo XXI”, y reclamó “alfombra roja para quién genera riqueza y tarjeta roja a quienes la destruyen”.

 

Juan Marín, naturalidad y cercanía

Precisamente estas dos palabras son las que mejor definen la intervención del candidato de C’s a la presidencia de la Junta Juan Marín, que cogió el relevo en el estrado a su paisano y compañero de partido en Sanlúcar. Desde el primer momento, con una amplia sonrisa en la cara, mirada ilusionante y dotes para la oratoria, el teniente de Alcalde del Ayuntamiento sanluqueño, desnudó las intenciones del partido Ciudadanos para Andalucía. Reiterando los tres ejes básicos del programa de C’s para nuestra comunidad autónoma; luchar contra el desempleo, acabar con la corrupción y regenerar las instituciones públicas. Además abogó Marín por “Devolver Andalucía a los andaluces” la cual parece atrapada en manos de un partido.Promesas de ayuda para los autónomos, propuestas de reformas de importante calado, no solo en el ámbito legislativo y la puesta en valor de suelos industriales desaprovechados fueron otros de los asuntos que marcaron la línea de las palabras del político gaditano.

La lectura de una breve letrilla de un amigo que le dedicó a la ciudad de Cádiz, diversas anécdotas de caracter humano, sucedidas durante la campaña y algún otro detalle que espetó fue lo que realmente le hizo meterse al público en el bolsillo y dar muestra de su simpatía natural y humanidad.

 

‘Naranjito’, el gran momento

Se hizo de rogar, pero llegó. Llegó el momento más esperado de la mañana, Albert Rivera subió al entablado entre vítores de la multitud asistente y regaló un magnífico discurso. Breve, directo y sin adornos, se permitió dos concesiones: la primera al principio, cuando hizo alusión y comparó con la propuesta del partido a la redacción y puesta en marcha de la Constitución de 1812, a la que se refirió como “un pacto entre ciudadanos para quitarle el poder a un rey absolutista y dárselo al pueblo”. El otro permiso, o gusto que se dio el dirigente barcelonés, fue el pronunciar su frase mágica al término de su intervención, su cita favorita, expresada por Victor Hugo, y que dice aquello de que “no hay idea más potente que aquella a la que le ha llegado su hora”.

Aparte de esto, en su discurso, sin guión, se refirió a Ciudadanos como “un proyecto y no como un partido”. Pasó por todos los niveles; tocando temas de calado provincial, regional, nacional y comunitario. Reiteró la importancia de incorporar la autocrítica dentro de los valores de la vida pública. Habló del Pacto contra la Corrupción, en la que dejó bien entendido que C’s, marca una gruesa linea roja separando la democracia y la corrupción. También al igual que Marín hizo referencia a la devolución del gobierno al pueblo. Se tomo con humor las grotescas declaraciones de otros partidos sobre el que él mismo dirige con puño de hierro y guante de seda.

Haciendo símil con una competición deportiva – actividad a la que demuestra ser afín y buen conocedor-, Rivera alentó a echar el resto en los 6 días que faltan para los comicios electorales andaluces. Se mostró muy seguro y no dudó en afirmar que “Ciudadanos va a ser la gran sorpresa de la noche electoral”. Además de con su frase-lema que lleva por bandera, se despidió con aquello de “Ha llegado el cambio, es el momento de los ciudadanos”.